La conservadora Unión Democrática ha confirmado su victoria pero no ha logrado la mayoría necesaria para gobernar en solitario, prolongando el virtual empate de bloques políticos en el país balcánico.
A su nuevo líder, el eurodiputado Andrej Plenkovic, le corresponde ahora intentar formar un Gobierno de coalición. “Las negociaciones con los partidos dispuestos a colaborar con nosotros se basarán en los principios básicos de nuestro programa. Estoy seguro de que tras la victoria de esta noche seremos el partido que tendrá el privilegio de formar un gobierno estable para los próximos cuatro años”, confiaba Plenkovic tras conocer los resultados.
Con el Partido Socialdemócrata en segunda posición, la formación de centro, Most, vuelve a ser el partido bisagra para formar gobierno, como ya hizo este año con la Unión Democrática. Un ejecutivo que tan solo duró seis meses debido a disensiones internas.
Si se reedita este pacto, en esta ocasión será necesario contar con otro socio minoritario para lograr los escaños necesarios para gobernar.
“No estoy sorprendida con el resultado. Creo que la Unión Democrática Croata ha ganado por el ambiente favorable a la extrema derecha en Serbia y en el resto de Europa. Son el partido de extrema derecha y por eso han ganado”, asegura esta mujer.
En 2015 la economía croata salió de una recesión de seis años. Según los analistas, un Gobierno inestable tendría difícil llevar a cabo las reformas necesarias en el país, especialmente en la Administración pública, la educación y el sistema fiscal.