Irán ratificó su plena disposición de cooperar en la estabilización de los precios del crudo, mientras que ello no frene su apuesta justa de recuperar su cuota en el mercado energético. En este sentido, la nación persa apoya un precio que fluctúe entre los 50 y 60 dólares por barril, así como cualquier medida que ayude a estabilizar al mercado. teleSUR