Tesla pierde un setenta por ciento más en el primer semestre del año, a causa de menos ventas de las previstas y operaciones financieras. El fabricante estadounidense de coches eléctricos de lujo tuvo unas pérdidas entre enero y junio de 516 millones de euros. Y eso pese a que vendió más vehículos, pero no los que había previsto. El aumento de sus ingresos se desaceleró del primer al segundo trimestre.
Durante todo el semestre, la compañía californiana produjo un total de 18.345 de sus modelos S y X. Una cifra récord para el fabricante. Pero, a nivel de resultados, también pesó la reciente compra de la empresa de energía SolarCity y una ampliación de capital.