Este martes 7 de junio se ha celebrado la que es en la práctica la última jornada del proceso de primarias en Estados Unidos.
Este “supermartes” se votaba en California (suroeste), Montana (noroeste), Nueva Jersey (noreste), Nuevo México (sur), Dakota del Norte y Dakota del Sur.
Previamente a esta cita, la agencia de noticias estadounidense Associated Press (AP), ya anunció que Hillary Clinton tenía los delegados suficientes para proclamarse candidata demócrata a la Casa Blanca, pero tras la votación de ayer ya queda confirmada dicha noticia.
De esta manera se convierte en la primera mujer en la historia del país en asegurarse la nominación como postulante a la Presidencia de EE.UU. por uno de los grandes partidos, el Demócrata.
En el lado republicano, el multimillonario empresario aspirante a la nominación, Donald Trump llegaba a este “supermartes” habiendo conseguido también los apoyos necesarios para asegurar la nominación de su partido para la presidencia.
Para el historiador Luis Togores, “los candidatos ya están elegidos y habrá que ver la oposición que tienen dentro de sus propios partidos con las quintas columnas”.
Daniel Cristancho, periodista y analista internacional, dice de Trump: “El tema no es tanto el discurso sino las formas que está empleando: racista, xenófobo, excluyente. Donde ha llegado no se podría entender sin la civilización del espectáculo”.
Rubén Herrero de Castro, profesor de Relaciones Internacionales de la Universidad Complutense de Madrid defiende: “Trump no está contra los hispanos sino contra los ilegales. Una encuesta le apoya en su intención de deportar a los que estén ilegalmente en el país.
Javier Martínez, economista y analista político, menciona que “Sanders continúa dando la talla a ver si filtra su discurso en el programa de Hillary”.