En los más secretos rincones de un disco duro, de una red de chips, de un universo virtual, electrónico, están ubicados los domicilios de muchos millonarios que con una intención real y concreta lo pusieron ahí: esconder su dinero.
¿Para qué? Hay muchas razones. Divorcios, seguridad, estrategia, pero la que más importa para el mundo y sus pueblos, evadir los impuestos, para burlarse de uno o muchos países, para burlarse de sus pueblos también, y para ser más ricos.
Bienvenido a Panamá. Paraíso fiscal para muchos, que no es ilegal que lo sea, sino lo que muchos aprovechan. Es paraíso porque ahí es más fácil esconder el dinero. Porque los impuestos son más bajos. Eso no es ilegal.
Uno de los que ofrecen los servicios para que usted ponga ahí el domicilio de su empresa es el bufete de abogados Mossack Fonseca. Una persona anónima filtró 2,6 terabytes de la información confidencial de este bufete al periódico alemán Süddeutsche Zeitung, quien al ver tanta información contactó al Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ, por sus siglas en inglés) para que escudriñara los millones de códigos, datos, procesos electrónicos, que revelaban lo peor de muchos millonarios del mundo, muchos famosos, muchos que tienen mucho: el primer ministro de Islandia, Sigmundur David Gunnlaugsson; el ministro de Industria de España, José Manuel Soria; el primer ministro del Reino Unido, David Cameron, y su padre; el presidente de Rusia, Vladimir Putin; el presidente de Argentina, Mauricio Macri; el futbolista argentino Lionel Messi; un primo del presidente de Ecuador; empresarios relacionados con el presidente de México, Enrique Peña Nieto; y con la campaña de Keiko Fujimori, candidata a la Presidencia de Perú.
Esto es la punta del iceberg, porque son 11,5 millones de archivos. Son empresas reales, fantasmas o de papel creadas desde 1977. Es 1500 veces más grande que la revelación de Wikileaks. Son 240 mil empresas, por lo menos.
En la investigación, es decir el análisis, trazo y cruce de datos, participaron más de 100 periodistas de todo el mundo unidos por el ICIJ.
¿Quién está detrás de todo esto? ¿Los millonarios ponen ahí su dinero sólo para esconderse de no pagar impuestos? ¿Y qué tal si hay dinero ahí, para hacer guerras, terror, y financiar sangre?
Papeles de Panamá (Panamá Papers) desde los estudios de Teherán, a las diez y treinta; Londres, seis de la tarde; México, doce del día; Colombia, una de la tarde; Madrid, siete de la noche.