España es el cuarto país de la Unión Europea con el precio de la electricidad más alto de la región. A pesar de contar con un elevado número de horas de luz al año, el gobierno del Partido Popular no fomenta el uso de energías renovables y pone trabas a las distintas iniciativas ciudadanas. Poco ante de que finalizar la legislatura, el gobierno de Mariano Rajoy estableció el llamado "impuesto al sol", el cual grava la energía que producen los particulares y que consumen dentro de sus domicilios. teleSUR