Mucho antes de que el reggaetón apareciera en la escena musical latinoamericana, el merengue se posicionó como uno de los géneros indispensables en cualquier fiesta. En 1997 un joven maracucho emergió con una propuesta romántica y bailable; 22 años después, Omar Enrique es conocido como “El príncipe del merengue” y está de vuelta con su nuevo tema “Si no creyera en fantasía”.