La realidad que vive el pueblo wayúu es verdaderamente dramática. La escasez de agua, la pobreza y el hambre han dejado cifras alarmantes que incluye la alta mortalidad de niños. Se calcula que en los últimos cuatro años más de cinco mil niños han perdido la vida a causa del hambre, evidenciando la indolente indiferencia del Estado colombiano para esta región del país. teleSUR