Luego de la represión de la dictadura chilena, los ciudadanos empezaron a organizarse y a retomar las calles. Los espacios públicos ahora son propicios para hacer comunidad y generar vínculos. Las festividades y el arte logran actualmente ese cometido. La seguridad y la educación depende del respeto a la cultura popular, dicen los chilenos, lo cual se vive y se disfruta en los barrios de Santiago y otras ciudades de la nación suramericana. teleSUR