Lento avance de las tropas iraquíes para recuperar el control de Ramadi. Es una de las ofensivas más importantes contra Daésh (se calcula que hay unos 3.000 combatientes), porque hacerse con la capital de la provincia de Anbar significaría impedir que el grupo radical pudiera comunicarse por carretera con sus bastiones en Siria.

La batalla comenzó el pasado martes, dando tiempo para que huyan los hasta diez mil civiles que se cree que hay en la ciudad, y desactivando nuevos artefactos explosivos que están ralentizando la ofensiva:

“En unos pocos días liberaremos toda la ciudad de Ramadi. Nos separa una pequeña distancia de ellos. Vemos cómo salen. Hemos matado a muchos de ellos y nuestros francotiradores han tomado posiciones en los tejados de las casas de Ramadi. Con la ayuda de Dios, liberaremos Ramadi pronto”, explica un militar de la unidad iraquí anti terrorista.

Una vez que haya concluido la toma de Ramadi, que tiene frontera con Arabia Saudí, Jordania y Siria; el siguiente