“…José subió de Galilea, de la ciudad de Nazaret, a Judea,
a la ciudad de David, que se llama Belén, por cuanto era de
la casa y familia de David; para ser empadronado con María su mujer, desposada con él, la cual estaba encinta.
Y aconteció que estando ellos allí, se cumplieron los días de su alumbramiento. Y dio a luz a su hijo primogénito, y lo envolvió en pañales, y lo acostó en un pesebre, porque no había lugar para ellos en el mesón”.
(Lc. 2, 4-7)