El tequila debe ser fuerte como mujer, pero suave y amoroso como ellas.
El tequila, fue una bebida de machos. Un trago que se toma derecho en cantinas y películas a blanco y negro. Una cofradía de charros cantores en la que no caben faldas.
Si usted piensa eso lo invitamos a descubrir con nosotros cómo ese México macho y excluyente fue abriendo paso inevitablemente a la presencia femenina que hoy produce su propio tequila, encuentra su silla en las cantinas o cata los tequilas con autoridad sin parangón.