Ni siquiera llegaron a salir del puerto. Al menos 14 refugiados sirios han muerto, 7 de ellos niños, al naufragar la embarcación de madera con la que pretendían alcanzar el sueño europeo. Sobrecargado y con un patrón poco cualificado, el bote se hundió nada más zarpar

– “Unos 40 o 50 inmigrantes fueron traídos al puerto en camión y se subieron al barco”, explica un testigo. “Creo que el capitán, que también era sirio, no tenía experiencia. El barco golpeó las rocas cuando estaban tratando de salir del puerto y se hundió poco después”.

La embarcación zarpó del municipio turco de Ayvacik, en la provincia de Canakkale. Los equipos de socorro lograron rescatar con vida a 27 personas.

Apenas una decena de kilómetros separan las costas de esta parte de Turquía de las islas griegas, un brazo de mar estrecho y traicionero que han cruzado más de medio millón de inmigrantes y refugiados en lo que va de año.