Las autoridades españolas detuvieron y trasladaron a un centro de internamiento a ocho de los quince refugiados que sobrevivieron a un naufragio en el mar Mediterráneo donde murieron 40 personas. Mientras estos ochos sobrevivientes esperan una orden de expulsión, organizaciones de derechos humanos denuncian el maltrato que reciben los inmigrantes en este país y rechazan las políticas migratorias del gobierno español y de la Unión Europea. teleSUR