Volkswagen anuncia un plan de acción para recuperar la confianza de los consumidores y los mercados. El gigante automovilístico alemán ha confirmado este martes que llamará a revisión a los propietarios de los once millones de vehículos que portan el polémico software ilegal con el que la compañía esquivaba los controles de emisiones. El encargado de dar la noticia era el director de marca del grupo, el alemán Herbert Diess.
“Hemos estado trabajando en varias soluciones”, decía, “para responder ante nuestros clientes. En breve nos pondremos en contacto con ellos para reparar sus vehículos y, quizá, incluir alguna modificación en los motores. Intentaremos hacerlo con toda la celeridad posible, aunque seguramente nos llevará algún tiempo”.
El escándalo afecta a la mayor parte de las marcas del grupo: Volkswagen, Audi, Skoda y también Seat, cuya directiva ha reconocido haber instalado al menos 700.000 de los motores investigados.
Económicamente, el engaño le está costando una for