Según el pacto, sellado bajo mediación europea, Kiev se compromete a comprar en octubre 2.000 millones de metros cúbicos de gas al gigante ruso Gazprom. Moscú bajará el precio que paga Ucrania, igualándolo a lo que cobra a los Estados miembro de la Unión Europea.
“Hemos llegado a un acuerdo que incluye obligaciones recíprocas y que garantizará el suministro durante el invierno y el tránsito seguro, a través de territorio ucraniano, a los consumidores europeos”, explica el ministro ruso de Energía, Alexander Novak.
“Las condiciones comerciales son aceptables para Ucrania y por mi parte puedo confirmar que serán un gran apoyo a nuestra economía, algo muy importante en la situación actual”, responde el titular ucraniano de Energía, Vladímir Demchyshyn.
Por su parte, la Comisión Europea se compromete a mantener su apoyo financiero a Ucrania para que pueda seguir comprando gas.
Este acuerdo de base será definitivamente ratificado por las partes en los próximos días.