Los refugiados que llegan estos dÃas en masa a Alemania pueden ser una oportunidad para una economÃa aquejada por el envejecimiento de su población. Asà lo entienden los patronos de las principales empresas automovilÃsticas, uno de los sectores del paÃs que más gente emplea en un momento además de paro en mÃnimos históricos.
Por ello, el director general de Daimler Dieter Zetsche declaró hace pocos dÃas a la prensa que deseaba reclutar directamente a estos refugiados en los centros de acogida. Luego, se añadió en este objetivo su homólogo de Volkswagen Martin Winterkorn.
Se calcula que, actualmente, Alemania necesita 140.000 ingenieros y técnicos. Pero también hacen falta operarios, enfermeros o personal de hotelerÃa. El problema es que la ley impide emplear a un inmigrante durante sus primeros tres meses en el paÃs y, por otro lado, tienen preferencia los propios alemanes, ciudadanos de la Unión Europeos o anteriores refugiados. Son, precisamente, las grandes empresas quienes ahor