El dentista que mató al león Cecil, Walter Palmer, ha vuelto al trabajo, este martes, entre protestas de defensores de los animales y una nube de periodistas. Tras seis semanas de silencio, este cazador de trofeos de Minnesota, insistió en una entrevista este domingo en que la cacería fue legal y dijo que ignoraba que se trataba del león más querido de Zimbabue.