Madrid, 27 ago (EFE).- (Imagen: Enrique Del Viso) Al argentino Daniel Veronese lo cómico suele sugerirle un desenlace dramático, una tensión que se intuye en "Bajo terapia", la obra que dirige en Buenos Aires desde comienzos de año y que llega el jueves a Teatros del Canal. "Espero que funcione tan bien como allá", desea en una entrevista con Efe.

El texto es de Matías del Federico y en España la interpretan Gorka Otxoa -"Velvet", "Águila roja"-, Manuela Velasco -"Velvet"-, Fele Martínez -"Los abrazos rotos"-, Melani Olivares -"Aída"-, Juan Carlos Vellido y Carmen Ruiz.

"No les conocía pero estoy muy contento con ellos. Ha sido una elección muy buena. Son actores con mucha iniciativa y muy profesionales. Estrenamos la obra en Avilés el 21 de agosto, con menos de un mes de ensayos, y el tour de force ha sido un éxito, porque todo el equipo tiene un ímpetu de trabajo importante", explica Veronese.

Tan satisfecho está con su equipo el dramaturgo, autor de "Mujeres soñaron caballos", que ya tiene decidido que serán sus dos asistentes, Nacho y Maite, quienes se queden a cargo de la obra, que girará por otras ciudades, cuando él regrese a Buenos Aires.

Aunque la producción española tiene su propia versión de la obra, para adaptarla al lenguaje y las referencias a la actualidad del país, Veronese explica que funciona "de la misma manera" que en Argentina.

"En Avilés la gente se reía en los mismos lugares que en Buenos Aires. La diferencia en las producciones tiene que ver más con los elencos, porque yo siempre trabajo mucho con los actores y les dejo sueltos para que generen teatralidad, cierto color de la escena", apunta.

"Bajo terapia" es la historia de tres parejas que van a recibir un tratamiento psicológico "especial": serán ellos mismos los que dirijan la sesión.

En Argentina, donde está en cartelera desde principios de año, "funciona muy bien" porque además de que "la gente se ríe mucho", su inesperado final "atrapa".

Su obra se inserta en la línea de la obra que es actualmente la "decana" de la cartelera madrileña, "Toc, Toc", las terapias psicológicas para solventar distintos problemas del comportamiento.

"En Buenos Aires, 'Toc, Toc' lleva cinco temporadas. Así que es muy similar la aceptación. Las terapias son un material con el que la gente puede sentir mucha empatía. Más que tópicos psicoanalíticos son de pareja, de las relaciones, de la vida de las parejas", detalla el director.

La clave de la conexión con el público, barrunta, es que, en definitiva, estas obras hablan de "lo solo que se está en pareja, y de lo que uno llega a permitir para no estar solo", algo en lo que, dice, "mucha gente puede reconocerse a sí misma o a personas muy cercanas" y por eso es fácil que se rían.

El humor si se exagera, dice, se convierte en drama, y ese ya "es un terreno distinto, eso no hace gracia". "Lo cómico libera tensión, pero si se pasa la línea se acerca a pasos agigantados a lo patético, a lo 'payasesco'