En Turquía, se cuestionan las verdaderas intenciones de la ofensiva antiterrorista lanzada por el Gobierno. Una semana después, lo único que está claro es que el proceso de paz con la guerrilla kurda del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) está herido de muerte y que las operaciones militares apenas han tenido impacto en la lucha contra los yihadistas del grupo Estado Islámico.

El líder del partido prokurdo Partido Democrático de los Pueblos (HDP), Selahattin Demirtas, asegura que el objetivo de los ataques lanzados en el norte de Siria es destruir la unidad territorial kurda, y que nada tienen que ver con la lucha contra los yihadistas.

El Kurdistán iraquí sufrió anoche los peores ataques aéreos desde el inicio de la ofensiva. Los habitantes de la zona viven atemorizados.

“La mitad de los vecinos del pueblo se fueron a causa de los bombardeos y tienen miedo de volver. Gran parte de nuestras cosechas y granjas se están quemando. La guerra no aporta ningún beneficio