El padre Carlos Cancelado nos relata el triste final de todos aquellos que alejados de Él rompen el séptimo mandamiento de su Ley que ordena: No robarás, y llevados por terribles sentimientos de odio y egoísmo arrebatan lo que no les pertenece; también el castigo y triste final para aquellos que hicieron de su lengua un instrumento de muerte por medio del chisme, destruyendo vidas y calumniando al prójimo, estos actos de odio y egoísmo no quedaran sin castigo en los tormentos del infierno, todavía hay tiempo de cambiar (de la visión del infierno de la vidente Oliva Arias)