Olikrom, una empresa emergente del suroeste de Francia, ha desarrollado toda una serie de pigmentos que dependiendo de la temperatura, la luz o la presión pueden cambiar de color. Estos pigmentos son resultado de meses de investigación. Los responsables de Olikrom aseguran haber despertado el interés de compañías aeronáuticas, de la industria del automóvil y de varios fabricantes de electrodomésticos.
“Se trata de materiales que tienen en cuenta tanto la parte orgánica como la inorgánica. Son nuevos materiales que, dependiendo de su composición, pueden cambiar de color adaptándose a la temperatura, a la luz y a la presión”, explica Jean-Francois Letard, fundador de Olikrom.
“Nuestro objetivo es desarrollar un tipo de pintura capaz de indicar,
por ejemplo, si una pieza de un avión ha recibido un impacto en el transcurso de un vuelo, añade Letard. Estoy hablando del impacto de un pájaro, del granizo durante una tormenta o de cualquier objeto en pista. Este tipo de percances pueden da