Más de 80.000 estudiantes y profesores salieron a la calle durante el 25 de junio para reclamar mejoras en el sistema educativo. La manifestación, organizada por la Confech y autorizada por el gobierno, llegó hasta el ministerio de Educación, donde los estudiantes hicieron entrega de un documento de nueve puntos exigiendo reformas más profundas y el derecho a la gratuidad de la educación.