Grecia muestra su división. En la plaza Syntgma de Atenas miles de ciudadanos han pedido la permanencia del país en la Unión Europea. La concentración se produce un día después de que en otra similar, en la que participaron unas 7.000 personas y en la que no hubo incidentes, los asistentes pidieran el fin de la austeridad y la firmeza del Gobierno de Alexis Tsipras ante las instituciones europeas.
Miembros de Nueva Democracia, el partido que disputó la victoria a Syriza el pasado mes de enero, y también socialistas del PASOK han apoyado la manifestación de este jueves. Según un estudio de un medio griego, siete de cada diez ciudadanos helenos quiere que el país se mantenga en el euro. A pesar de ello, el gobernador del Banco Central vaticinó una salida de la moneda única si las negociaciones no llegan a buen puerto.