La llegada del cardenal Angelo Amato, prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos, así como de otros cardenales y obispos marca el inicio de la ceremonia religiosa de beatificación de Monseñor Óscar Arnulfo Romero, asesinado en la ciudad de San Salvador el 24 de marzo de 1980.
En este contexto, el padre Numa Molina comentó que la celebración de hoy debería servir de reflexión en la iglesia latinoamericana, acercarse a los pobres y hacer cambios. teleSUR