Un segundo barco con más de cuatrocientos inmigrantes de la minoría birmana rohingya ha sido rescatado en aguas indonesias tras quedarse sin combustible. La embarcación provenía de Myanmar, como la que horas antes, con otros seiscientos clandestinos, fue localizada cerca de Aceh, en el norte de la isla de Sumatra. Fuentes malasias aseguran haber localizado otros dos barcos en similares circunstancias.

Cada año, miles de rohingyas se embarcan en un peligroso viaje con rumbo incierto huyendo del acoso que sufren en Myanmar y Bangladés. Los rohingyas son una de las minorías más perseguidas del mundo, según los informes elaborados por Naciones Unidas, que los califica de apátridas, ya que ni son reconocidos ni como ciudadanos birmanos ni bengalíes