Tres días de celebraciones que han concluido con una ceremonia anglicana en la Abadía de Westminster. La reina Isabel II de Inglaterra asistió junto a su marido, su hijo y el primer ministro David Cameron a una misa por la reconciliación y la unidad, y para celebrar la victoria de los aliados sobre la Alemania nazi hace 70 años.
Además de las autoridades, más de 1.000 veteranos presenciaron como el arzobispo de Canterbury agradecía en su homilía su lucha durante la contienda.
La ceremonia ha concluido con el tradicional “Last Post”, un toque de corneta que conmemora a los fallecidos en el campo de batalla.
Tras el servicio religioso un desfile militar recorrió la avenida de Whitehall, pasando frente al balcón desde dónde el primer ministro británico Winston Churchill pronunció el discurso de la victoria el ocho de mayo de 1945.
Cientos de personas siguieron en las calles la ceremonia y el desfile y pudieron contemplar la exhibición de los aviones Red Arrows de la Real Fuerza Aé