Todos, algún día dejaremos este mundo, pero morir luego de ser golpeado por un inodoro lanzado desde un estadio, es una forma muy bizarra de partir.

Luego del encuentro entre Santa Cruz y Paraná, que termino empatado a un gol, los ánimos se salieron de control y la batalla campal comenzó. La revuelta se tomo el estadio y la gente hasta arranco los inodoros de los baños del segundo piso del lugar y los comenzó a lanzar a los aficionados que se encontraban en la calle.

Un inodoro puede pesar aproximadamente 20 kilos. Uno de estos objetos lanzados a la calle impacto desafortunadamente en un hombre identificado como Paulo Ricardo Gomes da Silva, quien murió en el lugar.

El sitio donde ocurrió la revuelta, Recife, es una de las 12 ciudades sede de la Copa del Mundo FIFA a celebrarse el próximo mes.

La asociación de fútbol de Brasil suspendió todos los encuentros en este estadio hasta que los hechos sean esclarecidos.