Un hombre de la ciudad de México murió la semana pasada después de dispararse accidentalmente en la cabeza mientras se tomaba un selfie con un arma de fuego, según la policía.

En un ataque de vanidad inducida por el alcohol, Oscar Otero Aguilar, comenzó a tomarse fotos para publicar en Facebook, pero al parecer en busca de la selfie perfecta, Aguilar agarró una pistola calibre .45. Como era de esperar, las cosas no terminaron bien.

El hombre de 21 años de edad, de alguna manera se pegó un tiro en la frente y fue inmediatamente trasladado a un hospital, pero pronto sucumbió a sus heridas.