Dos niños pequeños han quedado huérfanos mientras su familia estaba de vacaciones en Cabo da Roca, Portugal, después de presenciar la muerte accidental de sus padres. La familia de Polonia visitaba el lugar la noche del sábado.
Los padres cruzaron una barrera para tomarse una foto juntos cerca de un precipicio de 140 metros de altura. Pero mientras sus hijos miraban, dieron un paso en falso y cayeron al acantilado.
Una pareja española fue testigo del accidente y llamó a los servicios de emergencia. El mal tiempo impidió a los equipos de rescate acceder a la zona. Los cuerpos de la pareja fueron finalmente recuperados el domingo. Sus hijos, de 5 y 6 años de edad, están en estos momentos a cargo de diplomáticos polacos.