En los últimos cinco años se han registrado más de 2.000 agresiones a médicos en España, 344 de ellas en 2014, lo que representa un leve descenso del 2,8 por ciento con respecto al año anterior. Sin embargo, disminuye el porcentaje de denuncias y en el último año hasta uno de cada tres facultativos no emprende acciones judiciales contra su agresor.