Organizaciones humanitarias informan de la “completa aniquilación” de Port Vila, la capital de la isla, donde el viento ha alcanzado los 340 kilómetros por hora.
Según las autoridades locales, el 80% de las casas de la ciudad han quedado gravemente dañadas.
Aunque todavía no se disponen de cifras oficiales de muertos y desaparecidos, ya que muchas islas del archipiélago siguen incomunicadas, la Oficina para la Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU ha informado de que al menos 44 personas han muerto en la provincia de Penama, en el centro del país.
Los servicios de emergencia de Vanuatu se preparan para un enorme operativo de búsqueda y rescate de supervivientes.
Según UNICEF, unas 260.000 personas han resultado afectadas por este ciclón de categoría 5.
“No puedo imaginar cuánto tiempo se va a tener que emplear solo en Port Vila. Se está hablando de meses o quizás de un año o incluso más para poder conseguir que este país se recupere y ayudar al pueblo de Van