Tensa espera en Atenas por el plazo dado hasta el viernes por el Eurogrupo para llegar a un acuerdo para renegociar el plan de ayuda a Grecia. El gobierno heleno lo considera un ultimátum y, desde Bruselas, se dice que no hay plan B. La discusión está bloqueada en si la transición hacia otro plan es una extensión del actual o un programa puente que deje de lado parte de las exigencias para detener el preceso de privatizaciones, restablecer derechos laborales y subir las pensiones.
“No estoy de acuerdo con la opinión de que era un ultimátum”, puntualiza el jefe de investigación y análisis de Merit Securities, el griego Nick Kafkas “Un ultimátum tiene otro sentido: tienes cuatro días o si no se ha acabado. En este caso, no había el se ha acabado. Pienso que habrá al menos para cinco o diez días más. Por tanto, hay tiempo para alcanzar un acuerdo”.
Los plazos se ciernen sobre el Ejecutivo de Alexis Tsipras. Este miércoles, se reúne el Banco Central Europeo para decidir si mantiene la