Entre las pruebas más utilizadas para la medición de la inteligencia podemos citar el test de Stanford-Binet o las escalas de Wechsler. La primera es una actuación del texto original desarrollado por Alfred Binet y Theodore Simon en Francia a principios de siglo. Fue presentado en 1916 por el psicólogo norteamericano Lewis Terman en la Universidad de Stanford, y fue revisado en 1927, 1960 y 1972. Orientado fundamentalmente a la valoración de la inteligencia en niños, la prueba consta de una serie de problemas graduados en dificultad que requieren para su solución de habilidades aritméticas, memorísticas y lingüísticas.
Los tests de inteligencia son usados con profusión en distintos ámbitos, como la Psicología educativa, la Orientación educativa o la Selección de personal.