Los Derechos Humanos, el gran escollo en la primera ronda de negociaciones entre
Estados Unidos y Cuba que finalizó el jueves en La Habana.
El Congreso estadounidense, de mayoría republicana, exige medidas como el multipartidismo y la libertad de prensa para aprobar la total normalización de las relaciones entre ambos países tras cincuenta años de enfrentamiento.
“Respecto a los Derechos humanos, el presidente Obama ha hablado de la cuestión, que continúa siendo el centro de nuestras conversaciones”, decía la jefa de la delegación estadounidense Roberta Jacobson. “Nos estamos asegurando de hacer llegar el tema directamente al Gobierno cubano, con el que mantenemos profundas diferencias”.
En este sentido, Cuba recriminaba a Washington la situación en Guantánamo o Ferguson.Y negaba recibir presiones de Washington, tal y como aseguraba Estados Unidos en un comunicado.
“Le confirmo que la palabra presión no se usó, tengo que decirlo”, señalaba la jefa de la representación cubana