Luego de dos meses de preparativos, en Ginebra se celebró la primera ronda de negociaciones libias, a la que representantes del Congreso Nacional General y de los Miitares no asistieron. Bernardino León, enviado especial de la ONU para Libia, consideró que estos siempre serán bienvenidos para la participación, pues el objetivo del organismo "es sacar al país de la anarquía, lograr un alto al fuego y controlar las armas".