En México, al menos siete fosas fueron halladas en el municipio de Chilapa de Álvarez, en el estado de Guerrero, con diez cuerpos y once cabezas. Miembros del ejército mexicano, peritos y agentes del Ministerio Público iniciaron las investigaciones. Al parecer, las víctimas murieron hace diez o veinte días y presentan heridas de bala y signos de tortura. teleSUR