La iglesia del distrito de Queens, Nueva York, ya acoge en su interior el cuerpo sin vida de Rafael Ramos, uno de los dos policías asesinados hace una semana por Ismaaiyl Brinsley.
Brinsley, un joven negro con problemas mentales, actuaba en venganza por las sonadas muertes de Michael Brown en Misuri y Eric Garner en Nueva York a manos de policías.
Sus víctimas, Rafael Ramos, de 40 años y padre de dos hijos y su compañero de patrulla, Wenjian Liu, de 32 años. Poco después de matarlos a tiros, Brinsley se suicidaba.
El entierro de Ramos tendrá lugar este sábado y a él se espera que asistan miles de policías venidos de todas partes del país, además de importantes personalidades como el vicepresidente Joe Biden o el alcalde de Nueva York, Bill de Blasio.
Los detalles del funeral de Wenjian Liu aún no han sido revelados, si bien su familia ya ha anunciado su deseo de que se trate de una ceremonia privada.