Las acciones de la red social sufrieron una importante caída, de más del 12%, tras presentar unos resultados trimestrales que decepcionaron a los inversores. Sin embargo, no es únicamente la marcha económica la que lastra la evolución de la red social en el parqué estadounidense, en el que ha visto como sus acciones han pasado en lo que va de mes de valer 50 dólares a situarse al rededor de los 42.
Lo que despierta el recelo de los inversores es sobre todo de su desaceleración a la hora de captar nuevos usuarios. En ese sentido, Twitter creció un 23% en el tercer trimestre del año, frente al 24% del año anterior. Añadió 13 millones de nuevos miembros a su red, frente a los 16 millones del trimestre previo, para un total de 284.
Ese dato se vio además coronado con unas pérdidas trimestrales de 138 millones de euros, cuando hace un año apenas superaron los 64 millones. Datos positivos como el crecimiento de la facturación o de los ingresos publicitarios no han servido para calmar a los inversores.