La prensa francesa ha plasmado con imágenes y pocas palabras el sentir de todo el país ante la ejecución del senderista francés, Hervé Gourdel.
De 55 años y padre de dos hijos, Gourdel fue secuestrado el domingo en Argelia. El autodenominado grupo Soldados del Califato amenazó con matarle si Francia no detenía sus operaciones contra los yihadistas en Irak.
“Creo que es cobarde. Es cobarde y es vergonzoso. No es normal que existan este tipo de cosas y que se permitan”, decía una francesa.
La población de Saint-Martin-Vésubie, donde trabajaba Gourdel, está de luto. Numerosas localidades francesas han organizado marchas este fin de semana en repulsa por el asesinato.
El ministro del Interior, Bernard Cazeneuve, lanza un mensaje claro:
“No, Francia no tiene miedo porque no debe tener miedo. El temor es un sentimiento que los terroristas quieren que tengamos. Si tenemos miedo supondrá una victoria para los terroristas”.
El ministro francés participa este jueves en un Consejo de Defensa presidido por François Hollande en el que se estudiará la estrategia de Francia contra el grupo yihadista Estado Islámico.
“Mi determinación es total y esta agresión la ha fortalecido. Continuaremos luchando contra el terrorismo en todas partes”, aseguró el presidente francés.
En este Consejo se analizarán nuevas medidas de seguridad para los ciudadanos franceses dentro y fuera del país. Las amenazas de los yihadistas ya han provocado un aumento de vigilancia en las calles del país.