El acuerdo alcanzado en la mañana del jueves en Minsk supone el fin de los combates. En la capital bielorrusa firmaron el protocolo Ucrania, Rusia, los separatistas y la OSCE. Será la Organización para la Cooperación y la Seguridad en Europa la encargada de verificar el cumplimiento del esperado acuerdo.
El ejército ucraniano y las unidades de milicianos prorrusos han recibido la orden de sus respectivos organos de gobierno para cesar los combates.

El presidente ucraniano expresó su confianza en que ambos bandos prosigan las negociaciones para el arreglo “definitivo” del conflicto en Ucrania: “En este protocolo hay doce puntos para asentar la paz y la estabilidad en parte las regiones ucranianas de Donetsk y Lugansk; con el respeto a la soberanía, la integridad territorial y la independencia de Ucrania.”

Por el momento las tropas ucranianas mantienen posiciones pero los combates han cesado. Salvo tres explosiones en Donetsk minutos después del alto el fuego, los testimonios sobre el terreno recogen que no se oyen más detonaciones en los frentes abiertos.