Tras matar al enemigo, ahora se le anima a convertirse al Islam. Después de publicar el vídeo de la ejecución de un periodista estadounidense, el Estado Islámico ha desvelado otro, en el que numerosos yazidíes, una minoría muy perseguida por el EI, se convierten supuestamente al Islam. El mensaje está claro: si adoptas el Corán, estarás a salvo:
“Aconsejamos y pedimos a los yazidíes que vengan de las montañas y se conviertan al Islam. Primero, para que puedan librarse del fuego del infierno, pero segundo, porque si siguen en las montañas, morirán de hambre y sed, porque la ayuda humanitaria de los países occidentales es una mentira”, explicaba uno de los militantes del EI
Como al resto de infieles, las opciones que la milicia yihadista suní da a los yazidíes son la conversión, pagar un impuesto, o la ejecución. Cientos de ellos han sido asesinados y miles han huido de sus hogares, pasando a depender de la ayuda humanitaria.
La Agencia de la ONU para los Refugiados lanzó está semana una de sus mayores campañas de entrega de alimentos y bienes básicos, con el objetivo de aliviar la situación de los más de 1.200.000 desplazados, no sólo yazidíes, provocados por el avance del Estado Islámico en Irak.