La morosidad de los créditos concedidos por los bancos, cajas y cooperativas a particulares y empresas ha vuelto caer en junio y se ha situado en el 13,06%, incluyendo el cambio metodológico en la clasificación de los Establecimientos Financieros de Crédito (EFC), que han dejado de ser considerados dentro de la categoría de entidades de crédito.