Obligados a empujar el coche y con el agua por encima de los tobillos. Esa es una de las imágenes que presenta este martes la ciudad estadounidense de Detroit tras la fuerte lluvia caída en las últimas horas.

Una lluvia que ha colapsado varias de las arterias principales de esta ciudad. Las autoridades han pedido a la población que eviten coger el coche salvo que sea estrictamente obligatorio ya que la circulación en muchas carreteras es prácticamente inviable.

Los servicios de emergencia se han tenido que emplear a fondo para rescatar a algunas personas de sus coches, pero también para actuar en sótanos y garajes que han quedado bajo las aguas.

Se espera que en las próximas horas la situación comience a remitir ya que se espera una ligera mejora del tiempo.