Al menos una persona ha muerto al sur de Rumanía, en la ciudad de Novaci, como consecuencia de las inundaciones que han azotado al sur y este del país, y más de 500 personas han tenido que abandonar sus hogares.

Cientos de casas y edificios se han visto también gravamente dañados por las crecidas

Las autoridades han movilizado a bomberos y agentes de la Gendarmería para socorrer a los damnificados y reforzar los cauces.

La alerta roja se mantendrá por lo menos hasta el jueves, ya que, no se esperan cambios en el tiempo.

En otros países, como en Suiza ya han comenzado las tareas de limpieza tras la fuerte tormenta que el pasado lunes provocó numerosas inundaciones en varias partes del país.

Una de las zonas más dañadas por la crecida de un torrente fue la ciudad de Altstätten en el cantón alemán de St. Gallen .