Varias aerolíneas habían decidido dar un rodeo en sus rutas hacia Asia para evitar el riesgo del este de Ucrania. Era el caso de Air Berlin, Qantas o Korean Airlines, entre otras: ¿por qué el avión de Malaysia Airlines cruzo ese espacio aéreo?
Tras el derribo de este avión la IATA, la asociación del sector ha pedido que los países les proporcionen los datos sobre los corredores libres de riesgos. Decidir sin embargo cambiar las rutas puede llevar a muchas compañías a verse en problemas ya que un aumento del coste de operaciones, y en consecuencia de los billetes, podría hacerles perder mercado.
“En los últimos 25 años”, dice John Foely, de Reuters BreakingViews, “el número de muertes ha caído por pasajero y viaje a menos de la mitad según la IATA. Pero esto no consuela ahora a las aerolíneas. Están enfrentando tantos problemas que el menor contratiempo pueden arrojarlas a la cuneta. Cosas como las compañías de bajo coste, los altos precios del combustible y los altos niveles de propiedad estatal llevan a que las aerolíneas sean reacias a reducir su capacidad, algo que necesitan”, asegura.
Aunque no es el único contratiempo: las pólizas de seguros para los aviones podrían incrementarse tras este caso, lo que repercutiría también en el consumidor y, por tanto, en los cada vez menores ingresos de las aerolíneas.