Noche de bombardeos y lanzamientos de cohetes en Gaza. La aviación israelí ha realizado una serie de ataques en represalia por los proyectiles disparados desde el territorio controlado por Hamás. Algunas fuentes cifran ya en nueve el número de palestinos fallecidos. En su mayoría son miembros de las Brigadas al Qasam, ala militar del grupo islamista, o de la milicia radical Yihad Islámica, según medios locales.
El ejecutivo del primer ministro Benjamin Netanyahu trata así, según un portavoz del ejército, de prevenir el lanzamiento de nuevos cohetes, mientras aumenta la tensión desatada entre palestinos e israelíes tras el descubrimiento del cadáver del joven palestino torturado y asesinado.
No obstante, analistas como Freddy Eytan, diplomático y antiguo embajador israleí, no creen que la ofensiva militar de Israel vaya a ir más allá: “Netanyahu no es belicoso. No se ha lanzado a realizar operaciones militares como hizo Ehud Olmert en el Líbano o Gaza. Él no lo hará. No es que dude, sino que es bastante prudente. En este sentido, creo que gestionará la situación de tal manera que si se calman las cosas en Gaza y no hay más lanzamientos de cohetes, tampoco habrá respuesta por nuestra parte”.
Israel ha asegurado además que hará todo lo posible por esclarecer el asesinato del adolescente palestino Mohamad Abu Jedir. Uno de los seis sospechosos arrestados ha confesado e implicado al resto en el crimen, que la policía cree que fue una venganza de ultranacionalistas por el homicidio previo de tres estudiantes israelíes.