El que es el séptimo desplazamiento oficial al gigante asiático de la canciller alemana tendrá la economía como tema principal. De hecho, en 2013 el volumen de comercio entre ambos países superó los 140.000 millones de euros.

Por ello la dirigente europea ha llegado con una amplia delegación empresarial. Entre los desplazados se encuentran representantes de Airbus, que han firmado un acuerdo con Pekín para la venta de 100 helicópteros a empresas chinas.

Sin embargo, no todo son negocios. Merkel ha aprovechado la visita para hablar de la detención de un miembro de los servicios de inteligencia alemanes, sospechoso de trabajar como agente doble para Estados Unidos. El mensaje de la canciller fue que de demostrarse, supondría una gran contradicción en cuanto la cooperación entre ambos países.