Los líderes de la Unión Europea (UE) se reúnen hoy y mañana en la ciudad belga de Ypres para decidir el nuevo presidente de la Comisión Europea y evaluar la situación en Ucrania.
Una ceremonia para conmemorar el inicio de la I Guerra Mundial ha abierto las conversaciones.
“La ciudad de Ypres es un símbolo de la brutalidad de la I Guerra Mundial. Los combates duraron cuatro años aquí y este es el lugar donde por primera vez en la historia un ejército usó gas mostaza contra otro. Esto hizo la guerra todavía más horrible”, cuenta Sándor Zsiros, corresponsal de euronews en Bruselas.
Esta ciudad de flandes aún conserva sus cicatrices. Fue rodeada por tres lados por las tropas alemanas, que en 1915 usaron por primera vez gas mostaza.
El museo de la I Guerra Mundial de Ypres muestra todo el horror de la contienda.
Una estudiante británica califica lo ocurrido de “triste” y “estremecedor”.
“Sí, nos ha abierto los ojos. Porque no puedes imaginártelo sin verlo”, dice su amiga.
Fueron cuatro largos años de pesadilla y carnicerías inútiles. Un millón setecientos mil soldados de ambos bandos murieron o resultaron heridos.
“El principal mensaje es que muestra la importancia del liderazgo. Porque si los líderes europeos en 1914 hubieran demostrado un poco más de liderazgo y responsabilidad, la guerra podría haberse evitado”, dice Dominiek Dendooven, historiador.
La mayoría de los soldados caídos en este frente fueron británicos y de los países de la Commonwealth.