Mehdi Nemmouche fue detenido el viernes en Marsella en un autobús con un Kalasnikov y un revólver en su poder. Las armas coinciden con las utilizadas en el ataque de hace 10 días en el que murieron 4 personas. Nemmouche estaba fichado y los servicios de inteligencia creen que tras radicalizarse en prisión fue a Siria a combatir con los islamistas, y después volvió a Europa.

Así lo explica la ministra belga del Interior:

“ Si la investigación confirma los elementos de los que disponemos, estaríamos antes el primer ataque cometido por una persona que ha vuelto de Siria. Obviamente, es muy preocupante y exige una respuesta transversal, para empezar en el apartado de la prevención”

Bernard Cazeneuve, ministro francés del Interior:

“ En concreto la próxima reunión entre ministros del Interior europeos y sus homólogos de Jordania, Túnez, Marruecos y Turquía, tratará de poner a punto fórmulas para mejorar el flujo de información entre nuestros servicios de inteligencia y para incrementar la vigilancia de las redes terroristas en toda la Unión Europea y en los países vecinos, sobre todo en estaciones de tren y aeropuertos”

En el ataque al Museo Judío de la capital belga, pocas horas antes de abrir los colegios electorales para los comicios europeos, murieron una pareja israelí, una mujer francesa y un joven belga. Según la fiscalía antiterrorista francesa hay numerosos indicios que relacionan al detenido con el atentado.